Justificación
La gestión educativa, conformada por un conjunto de
procesos organizados que permiten que una institución logre sus objetivos y
metas; requiere un diagnóstico,
planeación, ejecución, seguimiento y evaluación que se interrelacionan y conducen a la obtención de los
resultados propuestos. Esta es un área del conocimiento que no ha
sido debidamente implementada
en el ámbito educativo de los museos, si bien estos usan algunas estrategias de la pedagogía, la
gestión aun no se incorpora a sus tareas habituales. Esta investigación nace de un
trabajo conjunto desarrollado en el Seminario de Investigación de
AMA-CECA y termina por ser el trabajo de grado de la Maestría en Gestión
Educativa de la Autora.
Aun no se ha publicado.
El conocimiento obtenido con esta investigación, es
muy útil para el desarrollo de herramientas de diagnóstico, para la revisión de las
prácticas educativas dentro de los museos con fines de sistematización y
mejoramiento de las mismas.
Los beneficiarios directos de esta
información son, inicialmente, los actores internos
(trabajadores de museos), quienes verán un
mejor desarrollo de su labor diaria, con un beneficio indirecto pero
inmediatamente palpable para los
visitantes del museo (actores externos).
A partir de este estudio se pueden
sugerir nuevas investigaciones, y nuevas prácticas al interior del museo, que tengan
en cuenta los conceptos de la gestión educativa.
El diagnóstico de la percepción que
tienen los diferentes actores sobre la función educativa y del guía de museo,
permitirá la adecuación de los cursos de capacitación de guías afines a las
necesidades encontradas en el estudio.
El conocimiento y estudio de este
trabajo puede ser usado puntualmente por los directores de museo como una
herramienta de gestión.
Preguntas:
- ¿Se implementan conceptos y recursos de
la Gestión Educativa en los museos de Bahía Blanca?
- ¿Cuál es la percepción que
tienen los equipos directivos y educativos de los museos de Bahía Blanca
sobre su quehacer?
- ¿Los museos de Bahía Blanca
tienen capacitación de guías educadores y dicha capacitación es
sistemática?
- ¿La función del guía de
museo se percibe de igual manera para el público, para los docentes
visitantes, para el funcionario público a cargo de esta área y para el
equipo interno de trabajo del
museo?
Objetivos.
Objetivo General
Explorar cuales son las prácticas educativas que se
realizan en los museos de la ciudad de Bahía Blanca y si para llevarlas a cabo,
se implementan conceptos y recursos de las teorías de la Gestión Educativa.
Marco
Teórico.
- El museo
- La función educativa del
museo
- La gestión como concepto
- La gestión educativa
- La gestión educativa en el
museo
- El departamento o división
educativa del museo
- La política educativa en el
museo
- El guía o educador de museo
- La capacitación educativa
Descripción de la Unidad de Análisis
En esta investigación se estudiaron las prácticas y percepciones
de las personas que están vinculadas con el quehacer educativo del museo,
específicamente: los funcionarios públicos encargados de los museos, los
directores de museo, los guías, los docentes visitantes y el público general que
visita los museos de la ciudad de Bahía Blanca.
Diseño
Metodológico.
·
Investigación
Exploratoria.
·
Análisis
de casos
·
Técnicas
de Recolección de la Información: Encuestas y entrevistas semi-estructuradas.
Muestra
Se estudiaron seis museos de la ciudad
de Bahía Blanca, la cual cuenta con 14 museos.
Se seleccionarán 6 museos, lo que representa el 42,85 de la totalidad de
los museos de esta ciudad. Distribuidos así: 3 museos que poseen departamento
educativo y 3 museos sin departamento educativo.
Los actores a tener en cuenta para ser
entrevistados, son los mencionados en el esquema a continuación,
entrevistándose un individuo de cada categoría de actor, por museo.
Gráfico
No. 1: Muestra.
Resultados
En Bahía Blanca la mayoría de los consultados
consideran que el museo tiene una función educativa, solo dos solteros dijeron
lo contrario y sus respuestas no fueron ampliamente explicadas. Los argumentos
para justificar cual es esa función educativa varían según la categoría de
actor y la concepción de educación que
se tenga.
Sobre las visitas guiadas como actividades
educativas la mayoría respondió que sí, habiendo diferencia en la argumentación de cada grupo. En cuanto
a los talleres los consideran menos asociados al modelo escolar porque suponen
que el conocimiento se construye en conjunto con los visitantes.
Casi no hay recordación de
las actividades en otros museos, aunque los actores externos al museo
reportaron más experiencias que los actores internos. Los trabajadores de
museos en pocas ocasiones recordaron alguna experiencia, lo que podría denotar
que el contacto con otras instituciones que enriquezcan su labor es escaso.
Los objetivos y funciones
de los departamentos educativos están más claros para los museos que ya lo
poseen, incluso para los actores externos al museo, cuyas opiniones son más
intuitivas pero bien enfocadas. Los
docentes centran esas funciones al servicio de la escuela y el patrimonio.
Al igual que en las
visitas guiadas, hay aceptación sobre que la única función de los museos no es
atender a las delegaciones escolares sino por el contrario, que “todos tienen
derecho a educarse en el museo”; en el
caso de los actores internos a la
institución lo consideran su principal trabajo.
No cabe duda que el museo
se percibe como una herramienta de aprendizaje para los visitantes, pero así
mismo se reconoce que ese aprendizaje depende
del individuo, si quiere aprender o no.
En cuanto a la diferencia
entre el público general y el público escolar se perciben como diferentes, pero
los argumentos no son los mismos; según los servicios que se prestan y la
concepción de educación de cada museo se destaca más un grupo u otro.
Una de las conclusiones
interesantes fue encontrar que los docentes cuando incorporan al museo como
recurso educativo de su quehacer pedagógico, mantienen la frecuencia de
asistencia al mismo.
Los vínculos
museo-escuela, posteriores a la visita, son escasos y aunque hay un interés
mutuo por hacerlo no se realizan con tanta frecuencia, ni siquiera como una
práctica fija dentro del quehacer educativo de ambas instituciones; incluso
recientemente se están incorporando las redes sociales para llevar a cabo esta
labor.
En todos los museos se
realiza planificación de algún tipo, en los que cuentan con departamento
educativo, hay una coherencia entre los modos de planificación reportados entre
directores y guías. En los museos sin dicho departamento la planificación
depende más de uno u otro estamento, dependiendo quien está más interesado en
la función educativa, si el guía o el director.
En los museos de Bahía Blanca no hay del todo un
consenso sobre la existencia de una persona que lidere las actividades
educativas, aunque en los museos con
departamento educativo es más notorio que hay un engranaje entre los guías y su
dirección. En los museos sin departamento educativo no se reconoce claramente
quien cumpliría esa función.
Hay una opinión general sobre la necesidad que todo
el personal del museo esté al tanto del quehacer educativo del museo, que el
trabajo se realice en equipo con todas el área, si bien, se hace evidente que
en los museos sin departamento educativo de Bahía Blanca es muy volátil este
concepto.
Los museos tienen claro que la educación está
dentro de sus metas, esto es coherente con las respuestas dadas en la pregunta
uno sobre la función educativa del museo. En los casos donde se contesto que
no, es porque son museos más nuevos y que nacieron como colecciones que luego
se han transformado en museos.
Los términos asociados a la gestión empresarial
suelen causar resistencia entre el personal del museo, un ejemplo de eso es el
cuestionamiento sobre la “Gestión de la Calidad”, este concepto fue el más
popular en el auge de las teorías de la
gestión y por lo tanto las respuesta acerca del mismo fueron negativas,
solo en el caso de un museo cuya institución madre tuvo un proceso de este
tipo, recuerda haber llenado formatos al respecto.
Los museos consultados al ser instituciones
pequeñas los canales de comunicación son directos, hay pocos niveles entre el
guía más novato y el director. De los resultados generales se puede inferir que
en los museos donde hay un departamento educativo la comunicación es más
unificada entre los directores y el guía, esto puede deberse a que ya hay
argumentos y conceptos que han sido comentados en el grupo de trabajo y por
ende al momento de su respuesta ya hay un “discurso oficial”. Lo anterior,
lejos de ser negativo evidencia la solida comunicación entre las instancias del
museo. En cuanto a la comunicación externa cada vez más el uso de internet como
forma de promoción es predominante,
aunque es evidente que todas las instituciones hacen importantes labores
para dar a conocer sus propuestas no solo por internet sino por todos los
medios disponibles.
En Bahía Blanca hay pocos museos que cuentan con
departamento educativo, los que lo poseen se toman el trabajo de informar a sus
guías educadores, ó anfitriones sobre las características de dicho departamento
de una forma integral, no solo para ellos sino también para el resto del
personal del museo.
En los museos con departamento educativo como el
quehacer es más formal y pautado los directores saben y conocen los sistemas de
registro de los guías. En los museos donde no hay tal departamento los
directores no tienen conocimiento que sus guías llevan alguna forma de bitácora
o registro de sus actividades. Con lo cual es importante incentivar desde la
dirección el uso de esta herramienta.
En estos museos no se
realizan procesos de evaluación de la labor del guía, las únicas menciones al
respecto son con procesos de evaluación no sistemáticos y/o no
estructurados. “Mirar cómo le fue al
guía” o depender de la devoluciones de los visitantes puede convertirse en una
falsa evaluación, pues excluye al público
que no se expresa dentro del museo, sino que además deja de lado aspectos
internos de desempeño de los educadores.
Escribir los textos para los objetos en la sala es
un trabajo que tradicionalmente se han
encargado los curadores de los museos, bien sea que estos sean especialistas
internos ó externos al museo ó los propios directores, pero es reciente dar ese
lugar a los guías, para que ellos como comunicadores e intermediarios que son
con el público los realicen. En el caso de Bahía Blanca los directores que
consideran que sus guías si participan
de la escritura de textos, estos últimos no
lo creen así, y viceversa. Lo importante de esta disparidad de opiniones esta
en lo que se viene mencionando durante todas las conclusiones, no se hace
formalmente ó sistemáticamente la atribución de funciones, evaluaciones,
capacitaciones, etcétera, lo que termina repercutiendo en la falta de unidad en los conceptos internos
de la institución, que es uno de los objetivos de la gestión.
La formación en didáctica de museos tampoco hace
parte de los temas estudiados o abordaos por los guías, pero eso no quiere
decir que no tengan formación en didáctica pedagógica, pues la mayoría vienen
de la docencia.
Las experiencias agradables referenciadas por los
consultados fueron múltiples, el 98% pudo contar alguna experiencia agradable y
en la expresión no verbal se podía notar satisfacción y añoranza por la
experiencia vivida. En cambio solo el 50% reporto experiencias negativas, que
aunque escasas fueron muy ejemplificantes de las conductas no deseables en los
guías/educadores.
Las diferencias entre un
guía educador y otro son características notorias para los actores externos al
museo, la mayoría de los argumentos para diferenciarlos están referidos a
comportamientos favorables o no deseables en cualquier persona que brinda un
servicio y más un servicio educativo, las más destacadas son las asociadas a la
personalidad: amabilidad, pasión por su trabajo y las asociadas al desempeño
como por ejemplo amplios conocimientos y claridad para transmitirlos.
Resultados
Algunos de los resultados obtenidos
fueron:
1. Los museos reconocen y son reconocidos por su
función educativa.
2. Existen diferencias entre los museos con y sin
departamento educativo.
3. En todos los casos el departamento educativo es
considerado un lugar institucional de gran valor y anhelado por quienes no lo
poseen.
4. Los museos no han tenido en cuenta
recursos, conceptos y estrategias propias de la Gestión Educativa.
5. Los
guías/educadores son el centro del quehacer educativo del museo y la referencia
del publico en la relación museo- educación-visitante.
6. En
concordancia con el punto anterior, hace falta que desde el museo se plantee
cuales son las funciones actuales de sus guías educadores y cuáles son las potenciales
que podrían llevar a cabo. Incentivarlas, reforzarlas, afinarlas y luego
transmitirlas al público para que sean visibles.
7. La afirmación coincidente, acerca de las opiniones
de los Directores y guías, sobre la valoración de los recorridos guiados,
reafirma la importancia de las mismas, cuyo aporte se volcará en un aporte
socio – cultural desde los museos.
Bibliografía
Bibliografía Temática
·
Alderoqui
S. y Pedersoli C. (2011) La educación en
los museos. Editorial Paidós. Buenos Aires Argentina.
·
Davies
S. La planificación estratégica en los museos pertenecientes a corporaciones
locales; en Moore K. (1998) La gestión
del museo. Guijón, Ed. Trea, Asturias.
- Editorial Gijón, Trea.
Serie: Biblioteconomía y administración cultural. Asturias.
·
James
P. J. La evaluación de los méritos de los
museos; en Moore K. (1998) La gestión
del museo. Guijón, Ed. Trea, Asturias.
·
Jodelet,
D. (1988) en Moscovici, S., Psicología
Social II. En Alfonso Pérez I. La teoría de las representaciones sociales.
psicologia-online.com
·
Ministerio
de Cultura Colombia, Convenio PNUD/Col/96/017, UN Radio, Universidad Nacional
de Colombia, Museo Nacional de Colombia, Programa Red Nacional de Museos.
(2001) Serie
Radial Museos de todos y para todos.
Colombia.
·
Rivera
M. Jorge E. (2010) Herramientas de Gestión Educativa. Editorial Magisterio.
Bogotá, Colombia.
·
Sanz
Marquina y García Blanco
A. (2011) El departamento educativo en el
museo. Boletín de ANABAD año XXIX Número 4.
-
Bibliografía
Metodológica
·
Moscovici,
(1976), referido por Perera, M., 1999, pág. 7. En Alfonso Pérez I. La
teoría de las representaciones sociales. psicologia-online.com
·
Sautu R, Boniolo P,
Dalle P, Elbert R.(2005) Manual de
Metodología. CLACSO. Buenos Aires.
·
Wainnerman
C, Sautu R, (2001) La Trastienda de la
Investigación. Ed. Lumiere. Buenos Aires.
No hay comentarios:
Publicar un comentario